miércoles, 9 de febrero de 2011

1º- INVENTARIO


   Sin duda la sensación que una persona algo observadora tiene al entrar en mi habitación dista de ser la de orden. Pese a que de un primer vistazo parezca todo en su sitio y bien ubicado, no hay más que fijarse en las estanterías para comprobar que la heterogeneidad es lo predominante: varias películas, un desorodante, tres colonias, un despertador de hace años sin pila, el libro ''Mirall Trencat'' que me obligaron leer el año pasado, dos libros de texto sobre Platón y Descartes, un libro de Poemas de Miguel Hernández, diccionario Oxford de inglés ,el libro ''98 formas de decir te quiero'' cuyo título no llegué a relacionar jamás con su contenido, agendas de cursos pasados que no sé por qué no tiro, un ajedrez que se dobla sobre si mismo y sirve como caja, una miniatura de un Ferrari que conservo de mi infancia, una foto de mi viaje a Londres, un instrumento musical que mi hermana trajo de Colombia pero que ni siquiera sé su nombre ni mucho menos tocarlo, varios juegos de la Play Station 1 que guardo por si algún día me volviera a apetecer retormarlos (y así ocurre), unas cuantas hojas de formato A3 enrrolladas que acabo de descubrir y que están sin usar.. (su excesivo arrugamiento supone una gran pérdida) una pulsera que me regalaron y cuya combinación de colores rojo-amarillo-verde no se asemeja a mi estilo de vida... todo en la misma estantería.


Pero sin duda lo que más me atrae de esa estantería son las películas, sí, eso que para la gran mayoría son de usar y tirar (no en el sentido de tirar la película, que son caras) sino que representa para ellos un entretenimiento pasajero. Sin embargo voy a citar algunas de ellas que han sido capaces de producir sensaciones, enseñar valores y conocer más los comportamientos del ser humano. Una de las películas que se encuentran en esta estantería es 'Doce hombres sin piedad' , una película estrenada en 1957 (motivo suficiente como para que el 90% de la gente de similar edad a la mía la rechace) en blanco y negro (ya ha caído otro 5%). Su reparto se basa en 12 actores y su escenario en una simple sala con una gran mesa. Esos 12 actores son los miembros de un jurado popular encargado de declarar culpable o inocente a un acusado que tiene todas las pruebas que hacen indicar que fue él el autor del crimen. Esta película hace un retrato de 95 minutos sobre la injusticia en el mundo. Lo fácil que es ser injusto y provocar la desgracia a cualquier persona, sin apenas sentir remordimiento, y siendo un acto totalmente aceptado por la sociedad. Los personajes de esta película ni siquiera sospechan que están dando por culpable a un posible inocente, solo con leer las pruebas le es suficiente para ponerse de acuerdo y condenar a muerte a una persona sin que ella ni siquiera pueda justificarse. Conocer mejor los males del mundo y de la actitud del ser humano es un fin que sin duda consiguen película como esta. Otra película que se encuentra en esta estantería y que supone un gran recuerdo para mi es ''La vida es bella''. Esta película produce sensaciones que son dificiles de explicar, ¿pena y alegría a la vez?, ¿tristeza y felicidad?.. me es imposible explicarla sin contar el final por lo que para no fastidiar a aquel que no la ha visto aún acaba aquí mi descripción.

2 comentarios:

  1. Algo diferente del resto. Bastante personal la verdad. Cosas como estas dicen mucho sobre como es la persona.

    Un saludo! :)

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  2. hello!
    está bien, pero la letra no se ve muy bien, por lo menos en mi ordenador.
    podrias cambiarla a un color mas cercano al blanco!

    un saludoo! =D

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